Impacto del dólar alto se verá en precios nacionales de junio

La inflación de enero a mayo del 2018 cerró con una variación del 1,2%, a raíz de dos estanca­mientos de precios consecuti­vos y un “tímido” aumento en mayo, según datos del Banco Central del Paraguay (BCP). A pesar de que el aumento del dólar ya se reflejó en la infla­ción de productos importa­dos, el efecto en los productos nacionales se notará recién en este mes, afirmó Miguel Mora, economista jefe del BCP.

“Los precios de bienes dura­deros aumentaron, aunque el choque es reciente, y el mayor efecto del fortalecimiento del dólar se verá reflejado recién en los precios nacionales de la canasta de consumo de junio”, aclaró el técnico.

Miguel Mora. Miguel Mora.
El informe presentado por el Banco Central, recien­temente, menciona que los bienes duraderos, princi­palmente aquellos de ori­gen importado, registraron incrementos de precios como los identificados en vehícu­los, electrodomésticos para el hogar y equipos audiovi­suales, debido a la deprecia­ción del guaraní respecto a la moneda norteamericana observada en el mes de mayo.

Según el historial de casas de cambio, el dólar tocó su pico más alto el 30 de mayo, con un precio de G. 5.730 a la venta minorista, mientras que el cambio interbancario (coti­zación que ofrecen los ban­cos), era superior a G. 5.780, aproximadamente. En tanto, desde el 10 de ese mes empezó a subir “escalonadamente” la divisa, al ritmo del mar­gen internacional, pero a un menor efecto.

Sin embargo, desde el 26 del mes pasado, hasta culmi­nar, se registraron las mayo­res subas. En ese periodo, el Banco Central entró a inter­venir, con ventas diarias de hasta 6 veces más de lo que realizaba en el mercado, de manera a tranquilizar. El pre­sidente de la entidad moneta­ria, Carlos Fernández Valdo­vinos, aclaró que el efecto de suba era global, y que tam­bién se registraba aumento de demanda de multinacio­nales y petroleras en el mer­cado local, pero que había poca oferta, razón por la cual también incrementó su par­ticipación.

Por otro lado, un efecto inmi­nente, que también se regis­trará este mes en la inflación, es la suba de los combusti­bles, que ya iniciaron en algu­nos emblemas. Sin embargo, el efecto disminuye, ya que el pasaje no subirá, al menos hasta el momento. Desde el sector empresarial se temía que estos ajustes cobren un efecto “sicológico” y se refle­jen en aumentos de todos los productos principales de la canasta básica familiar. LN